Actualmente los sistemas productivos pretenden emular el funcionamiento ideal de los ecosistemas naturales, en los que prima la no generación de residuos y el aprovechamiento máximo de los recursos (agua y energía). Si partimos de la base que históricamente los sistemas productivos tradicionales disponen de un funcionamiento lineal en el que se cree en el uso ilimitado de los recursos y que cuyo procesado genera inevitablemente una serie de desperdicios que finalmente terminan depositándose en vertederos controlados y por tanto desperdiciándose los recursos materiales en ellos contenidos. Evidentemente esta creencia es errónea y desde hace unos años desde la Comisión Europea se ha lanzado una estrategia conocida como “Economía Circular”, en la que se pretende que los sistemas productivos emulen a los ecosistemas naturales, optimizando el aprovechamiento de los recursos y por tanto minimizando la generación de residuos. En esta propuesta se ha aplicado estos principios sobre técnicas y tecnologías ambientales que son innovadoras e incorporan la minimización en el uso de agua y en la valorización de residuos como mecanismo para hacer más sostenibles procesos industriales característicos de la Comunidad Valenciana, así como se incrementa su divulgación mediante las nuevas tecnologías (plataformas online).

El centro responsable del proyecto ha desarrollado una nueva gama de materiales fungibles procedente de una fuente residual (moletas eco-sostenibles, soportes fotocatalizadores y membranas filtración tangencial). Además de conseguir concienciar al sector con la implantación de nuevos materiales que les permita abaratar costes de producción y con el apoyo de las nuevas tecnologías de la información (plataformas).