El objetivo principal del proyecto es la valorización de un producto cerámico bactericida, protegido por ITC-AICE, que presenta un poder biocida en contacto con agua o líquidos, verificar su validez y duración mediante el diseño de dispositivos que puedan contener estas microesferas, diseñar y fabricar demostradores, comprobar su eficacia en entornos reales, y por último, realizar la correspondiente transferencia de resultados a empresas y consumidores.

Los dispositivos en desarrollo serán sostenibles y económicamente competitivos en el mercado, y fáciles de acoplar en sifones, grifos y otros elementos a fin de mantener una excelente calidad higiénica en aparatos sanitarios como lavabos o duchas. La intervención evitará la formación de biofilms bacterianos, el desarrollo de bacterias potencialmente patógenas y la producción de aerosoles con carga bacteriana. De este modo, la cerámica asume una función distinta a la de su uso tradicional, al actuar también como agente bactericida en tiempos en los que reviste suma importancia mantener la asepsia al máximo posible, especialmente en el entorno hospitalario.